Otra Perspectiva 

María Seva Gómez

Hace algunos días cuando alguien me comentó que para el nuevo año 2005, se celebraba el "XXV ANIVERSARIO DE LOS VERDES", me quedé un poco perpleja. ¿Cómo podía ser, que hiciera ya 25 años, que esa idea que surgió como una locura de adolescencia, se hubiese convertido en algo tan importante para la Semana Santa Callosina? Hoy la "Semana Santa Callosina" la vemos con otra perspectiva: Han surgido varias cofradías nuevas. La gente esta muy motivada porque nuestra Semana Santa no tiene nada que envidiarle a la de otros pueblos cercanos o lejanos. Hay mucha participación. Por eso hoy es muy fácil apuntarse en cualquiera de ellas. La Semana Santa en nuestro pueblo está en auge desde hace unos años. Pero lo que a mí siempre me ha llamado la atención y me ha enorgullecido es ver cómo este grupo de chicos, que ninguno tenía mas de 18 años, han ido esforzándose porque la Semana Santa tuviese otro tono distinto, ni mejor ni peor del que había en ese momento, era simplemente otra perspectiva, simplemente la que ellos le querían dar. Yo la recuerdo especialmente, porque ese año 1980 me marcó para toda la vida, para mí y para las personas de mi alrededor fue el año más triste de nuestras vidas, pero lo cierto es que siempre que he pensado en ese año lo he asociado a las ganas de emprender nuevos retos, las ganas de luchar y la ilusión por las cosas (por todo: sea más o menos importante) Todavía me acuerdo de esa primera procesión donde: No hubo ninguna imagen que "venerar", no hubo tiempo, ni dinero, sólo una sencilla cruz, de madera, y sin ninguna ornamentación, pero que reflejaba totalmente el sentimiento que este grupo de jóvenes quería ponerle al nuevo paso. Hoy todos sabéis que la imagen del "Cristo de la Caída", sin menospreciar a ninguna otra, es una de las imágenes más hermosas que procesionan por nuestras calles en estos días. Tampoco hubo banda de música, solamente unos cuantos tambores que acompañaban y que hoy en día ha permanecido invariable y con su redoble nos dice "que vienen los Verdes". También me acuerdo de esos 20 adolescentes, que vivían prácticamente todos en el Barrio Lucas, y además "amigos", con unas ganas locas de participar, unas vestas un tanto extrañas ( no eran las típicas de raso y capirote), se le quería dar un sentido de recogimiento y meditación que ellos pensaban que era fundamental en la Semana Santa, y es ese mismo espíritu el que ha perdurado a lo largo de estos años, pues hoy en día no ha cambiado un ápice el sentimiento y la ilusión con la que emprendieron este proyecto. Bueno sí, hoy ya no son 20 chavales, hoy son cerca de 300 los cofrades que participan en esos días para que todos salga con el esplendor y la solemnidad que ellos desean y la Semana Santa callosina se merece.